Si es bueno para los niños, es bueno para la sociedad

Viernes, Diciembre 12, 2014 - 16:39

Por Gidália Santana, World Vision Brasil.

11 de diciembre de 2014

¿Cuáles son las formas de violencia más preocupantes contra los niños en América Latina y el Caribe?

Hay innumerables, es difícil hacer una categoría de valor por orden, lo que es muy claro es que la violencia que está más cerca de los niños se encuentra dentro de la propia casa. Es por eso que desde la Comisión Interamericana, hemos dado mucho énfasis al derecho del niño a vivir en familia, el derecho del niño a la convivencia en paz, a vivir en un entorno comunitario y familiar, libre de violencia. Y esto como una obligación del Estado, de crear las capacidades y los servicios para asegurar que eso ocurra, además, que estos temas no se discutan entre cuatro paredes sino se analicen en todos los niveles. Que los padres discutan sobre la educación de los niños, sobre el impacto de la violencia, cómo educar sin violencia, que evalúen su práctica en un entorno cercano a su vida cotidiana. Eso no existe, es absolutamente fácil de hacer, no es nada complicado, no hay que inventar nada, mas crear condiciones en la comunidad donde los padres analicen su práctica educativa. Entonces, yo diría que ahí está una violencia que, si no se atiende, se da pie para otros tipos de violencia cada vez más graves, porque un niño o una niña que vivió en un entorno violento, fácilmente pasa a la violencia en la calle, o la violencia en la pareja, y puede terminar en situaciones más difíciles. 

¿Cuál es el principal reto que usted ve para concretar la reducción de la violencia contra los niños y las niñas? 

Siendo ese el origen de varios tipos de violencia, el entorno familiar y comunitario es el principal para proteger a los niños. Conocemos más de la violencia dentro de la familia y sabemos lo que se puede hacer para abordarlas. Sin embargo, hay otros tipos de violencia, como la que sufren los adolescentes en los espacios públicos y en la Internet. En los espacios públicos que son lugares donde nadie se responsabiliza por ellos, donde el crimen organizado ha entrado, donde los adolescentes son víctimas de actividades criminales para diversos fines.  Es algo que todavía no se conoce tanto como la violencia dentro de la familia, o la escuela, y que hay que apuntar. Estamos intentando hacerlo con el informe sobre los derechos del niño con el apoyo de Plan, considerando espacios de violencia que incluyen al crimen organizado. Ahora vamos empezar una investigación y un informe con el apoyo de World Vision, sobre cómo fortalecer los sistemas justamente de prevención y promoción de derechos, justo engloba todo lo que estamos hablando. 

Usted también habló sobre la violencia de la policía militar, que es una violencia institucionalizada. 

Absolutamente, en esos espacios públicos no están ni papá, ni mamá, no está la maestra, ¿quién está? Está la policía, que no es una referencia de protección para los chicos. Y debería serlo, para eso debería existir. Sin embargo, esta es otra lucha que debemos dar para asegurar un entorno sin violencia, si es bueno para los niños es bueno para toda la sociedad. 

En Brasil estamos discutiendo un Proyecto de Ley 4471 sobre los “Actos de Resistencia”. Hoy la policía puede matar y alegar “acto de resistencia” para que no se realice una investigación, esto da pie a que muchos jóvenes, principalmente negros, mueran. ¿Cuál es su opinión? 

Considero que es más una característica de las dictaduras, desde un Estado de Derecho es absolutamente inadmisible. Creo que no debería haber problema para aprobar esta ley urgentemente, es necesaria. Y no únicamente una ley sino un mecanismo para asegurar que efectivamente eso ya no ocurra. 

Hoy, principalmente los diputados apoyados por asociaciones vinculadas a la policía están dificultando la aprobación.  Entonces, ¿cómo podemos sensibilizar a estas personas, qué trabajo debemos hacer, considerando que el niño es tomado por la sociedad como una amenaza? 

¡Los comunicadores tenemos mucho que hacer! Cumplir nuestra función de informar. Informar para poder actuar. Porque la información que hoy recibe la población es para no actuar, es para tener miedo y callarse. Tenemos que actuar para que su derecho de estar informado posibilite exigir los cambios que precisan una vida sin violencia. 

¿Podría comentar sobre el problema del racismo que está vinculado a este tipo de violencia? Y que no es un reto sólo en Brasil sino también para América Latina. 

Estas preguntas tienen muchas respuestas, yo te doy únicamente un aspecto. El tema es más complejo que la realidad. La discriminación es consecuencia de una cultura colonial muy arraigada y una democracia muy corta. La sociedad debe ser actora de su propio destino, la educación y la política deberían ser de emancipación para las personas, que pudieran realmente entender su realidad y apuntar a las medidas que corresponden para mejorar. Hoy en día, a pesar de estar en un Estado democrático, los medios de comunicación conspiran contra esa libertad, la libertad que es producto del entendimiento y de la información. No se puede ser libre si no se está informado. Y es por eso que el debate sobre los medios es fundamental. Hay un hilo conductor entre medios y discriminación, porque ellos justamente venden una imagen, una lectura de cómo es la sociedad, que nos es la real y que hay muchas lecturas que no aparecen en los medios.