Los jóvenes de las Américas

Martes, Abril 21, 2015 - 19:03

Por Jocabed Lozano, Representante Juvenil de World Vision

La Cumbre de las Américas es un espacio trienal de reunión para los Jefes de Estado y de Gobierno de los países miembros del continente, con el objetivo de debatir sobre aspectos políticos compartidos, afirmar valores comunes y comprometerse a acciones concertadas a nivel nacional y regional, haciendo frente a desafíos presentes y futuros que enfrenta América Latina y el Caribe. En ese marco se realiza el Foro de Jóvenes de las Américas generando un espacio para la participación de los jóvenes, ofreciendo soluciones, propuestas y acciones innovadoras. El 10 y 11 de abril se realizó la séptima edición de la Cumbre, y en los días previos la cuarta edición del Foro. 

En el primer día de actividades los jóvenes nos dividimos en diferentes mesas de acuerdo a los temas que se abordarían: educación, seguridad, migración, participación ciudadana, gobernabilidad democrática y medio ambiente. Estábamos aquí representando a los miles de jóvenes que viven en América Latina y el Caribe; no era un reto sencillo. Teníamos enfrente una tarea enorme, debíamos entregar propuestas a los presidentes que asistían a la VII Cumbre de las Américas. 

Unidos por la transformación 

Participé en la mesa de educación con alrededor de 100 jóvenes. Para concretar nuestra visión, exhortamos a los jefes de Estado a programar la agenda de trabajo post-2015. Nuestras conclusiones fueron contundentes y se plasmaron en la declaración oficial que se entregó a los gobernantes. En ella se puede leer la exigencia que hacemos respecto a la educación, concibiéndola como un derecho universal, desde preescolar hasta universitaria, de la más alta calidad, gratuita, multicultural, pluralista e innovadora, que nos prepare para afrontar los desafíos que nos esperan como futuros líderes. 

Por un continente incluyente 

Durante las sesiones, me di cuenta  que había muy poca representación de jóvenes de pueblos originarios, por ejemplo, afrodescendientes, o Kunas originarios de Panamá, como es mi caso. Trabajamos para tomar un consenso en conjunto y no fue sencillo. Por ser un grupo minoritario no se percibía la misma participación. Pero estábamos decididos en lograr un cambio en el continente y éste comienza con la inclusión de las minorías en espacios donde su voz pueda ser escuchada; como representante éste era mi rol. 

¡Después de varios diálogos y siguiendo protocolos, logramos que la declaración de los pueblos indígenas fuera incluida! Se introdujo en el folder oficial en donde iba la declaración oficial de los jóvenes. Esto fue un gran logro para todos. 

World Vision ha impulsado el trabajo con los jóvenes en un continente donde el 30% de la población tiene menos de 18 años, facilitando espacios para el diálogo, la construcción de propuestas y proveyendo de herramientas para fortalecer su liderazgo, pero sobre todo, para empoderar a las nuevas generaciones en la construcción de un continente equitativo y libre de violencia. 

Lección de vida 

Como representante de laComunidad de Estudiantes Cristianos CEC, organización afiliada a la Comunidad Internacional de Estudiantes Evangélicos, del Laboratorio de Ideas y Acción y de World Vision, tuve la oportunidad de participar y brindar mi mayor esfuerzo para ser luz y sal a través de palabras y acciones en el IV Foro Juvenil de las Américas. No podíamos silenciar la voz de Jesús en este espacio, reconocemos que nuestra fe da sentido a lo que hacemos. Participar en una evento tan importante, me permitió entender la realidad y retos que tiene nuestra generación de jóvenes. Muchos de ellas y ellos serán los líderes de influencia en nuestra región en los próximos años. 

Para leer la Declaración completa: http://www.wvi.org/es/IVForoCumbre