Una región libre de violencia

Miércoles, Noviembre 19, 2014 - 14:23

Por David Muñoz, Gerente Regional de Comunicaciones World Vision América Latina y El Caribe

Ciudad de México, noviembre 2014.- World Vision América Latina y el Caribe lanzó recientemente la campaña: “Una región libre de violencia infantil”, la cual busca contribuir en la construcción de un Continente donde se establezca la paz entre los pueblos, con un enfoque especial en los niños y las niñas. 

En medio de una región que sufre de violencia hacia los niños, adolescentes y mujeres, ya sea mediante prácticas culturales o injusticia social, World Vision decide enfocar sus esfuerzos en la reducción de la violencia a través de los diferentes programas y actividades y además, generar conciencia entre la población. 

Las víctimas rondaban los 20 años de edad y estudiaban en una escuela rural, en Ayotzinapa, Guerrero para convertirse en profesores.

Pero, ¿qué tan grave es la situación de violencia? La respuesta a esta interrogante puede encontrarse en los recientes eventos que han impactado al pueblo de México con la desaparición de 43 estudiantes en el estado de Guerrero. Se presume que fueron secuestrados por la policía bajo las órdenes del alcalde local y posteriormente entregados a un grupo de la delincuencia organizada. 

Días atrás, las autoridades confirmaron que los estudiantes fueron asesinados, sus cuerpos fueron quemados y sus cenizas fueron arrojadas a un río. Los padres de los estudiantes reaccionaron de inmediato, algunos afirman que la evidencia no es concluyente e insisten en que sus hijos siguen con vida. 

Las víctimas rondaban los 20 años de edad y estudiaban en una escuela rural, en Ayotzinapa, Guerrero para convertirse en profesores. El 26 de septiembre viajaban en autobuses hacia una protesta por la falta de financiamiento para su centro educativo. Desde entonces, nadie los ha vuelto a ver o se ha sabido de ellos. 

Bloqueos de carreteras, manifestaciones a nivel nacional y una sociedad civil que demanda al gobierno que los estudiantes aparezcan “vivos”, son sólo algunas de las consecuencias de esta horrorosa escena de violencia contra un grupo de estudiantes, que no son los primeros en la nación, y que desafortunadamente no representan un caso aislado en México y Latinoamérica. 

Ciertamente esta situación tiene una carga política, pero es el nivel de violencia y la manera de disolver cualquier demostración pública a través de acciones agresivas hacia los jóvenes lo que no puede darse por sentado. Mientras las Maras mantienen la lucha por el territorio en Centroamérica y asesinan a los jóvenes que se niegan a unirse a ellas, miles de niños huyen hacia la frontera de los Estados Unidos, no obstante el territorio mexicano no es seguro para ellos, ni para los estudiantes, ni para los migrantes. En los últimos seis años, 47,000 migrantes han sido asesinados por el crimen organizado en México. 

En 10.7 millones de hogares de la República Mexicana, al menos un miembro de la familia ha sido víctima de un crimen o de violencia (INEGI – Instituto Nacional de Estadísticas, Geografía e Informática, 2014), esto representa el 40% del total de familias mexicanas. 

La violencia ha crecido a niveles desproporcionados, afectando principalmente a las nuevas generaciones de niños y jóvenes en Latinoamérica, y causando severos daños colaterales en las familias, comunidades y países. Pero son también ellos quienes buscan un cambio en sus vidas y en la manera de superar la violencia, antes de que la violencia los supere a ellos. 

Es allí donde las iniciativas regionales de World Vision se enlazan con los jóvenes en una causa común, una región libre de violencia a través de acciones específicas: transformar el paradigma de relaciones dentro de una cultura de paz, superar la pobreza y proporcionar a las nuevas generaciones las herramientas para hacer frente a los retos que actualmente tiene Latinoamérica. Es sólo a través de la coordinación y el diálogo abierto con los jóvenes que World Vision puede lograr la visión de un Continente libre de violencia.