Un grupo de emprendedores de Playa Grande: Ejemplo de tesón y entrega

Es jueves, son las 9 de la mañana en Playa Grande, donde encontramos a cinco entusiastas jóvenes. Harina, sartenes, risas y agradables conversaciones son parte del ambiente que se disfruta en la casa en la que funciona la panadería San Antonio.
La casa donde está la panadería, es de la líder de la comunidad, doña Maribel Barrios, la que ha facilitado para apoyar a los jóvenes ya que goza de una ubicación ideal para la venta del pan recién horneado y tibio que se produce todos los días.
Hace unos cinco meses atrás, un grupo de adolescentes y jóvenes entre los 14 y 22 años de edad, se organizaron y solicitaron a Visión Mundial capacitaciones para echar a andar un proyecto de panadería en la comunidad Playa Grande, ubicada en Granada. En esta comunidad no existe un negocio de esta naturaleza por lo que los jóvenes pensaron que eso sería un punto a su favor y ayudaría a ser autosostenibles.
“Iniciamos diez, pero ahora sólo estamos ocho” comenta Betty. Se reúnen de dos a tres veces por semana, dependiendo de la demanda de producto y el comportamiento de las ventas.
Betty, una joven de 18 años, delgada, morena, entusiasta y con ganas de salir adelante es integrante de este grupo de emprendedores. “Quiero superarme y no quedar aquí no más, estoy segura de que este aprendizaje me ayudará a alcanzar mis metas” enfatiza.
Además de trabajar durante la semana con el grupo, ella estudia por las tardes su cuarto año de secundaria en la escuela de la comunidad. Proviene de una familia de ocho hijos, “Yo soy de las mayores, mis hermanas tienen 14, 15 y yo de 18” explica Betty.
“Al inicio se me hacía difícil estudiar y participar en el grupo, pero cuento con el apoyo de mis padres, y lo más importante es que puedo aportar algo en la casa” explica con una sonrisa. Su padre don Wilfredo Álvarez, ha sido el sostén de la familia, quien trabaja como soldador y haciendo barcos artesanos.
Al igual que Betty, los otros jóvenes sienten que la comunidad apoya esta iniciativa. Cerca de la una de la tarde el pan está listo y la gente va llegando poco a poco a comprar, sino los mismos jóvenes van a las pulperías de la comunidad a ofrecer el pan.
Visión Mundial está apoyando iniciativas como éstas, sobre todo cuando los involucrados son jóvenes emprendedores y con ganas de salir adelante. Algunos de los integrantes del grupo de panadería, ya han finalizado su educación secundaria, pero no han podido seguir estudiando por la falta de recursos. Hoy, al estar en una actividad nueva y que además genera algunos recursos se sienten motivados.
Durante este tiempo Visión Mundial ha apoyado al grupo con la materia prima y los utensilios propios de la panadería. Al preguntar a los jóvenes sobre la sostenibilidad del grupo, rápido sonríen y dicen “estamos vendiendo”. Es un sueño de todos que con las ganancias puedan ayudarse a sostener y comprar todo lo que vayan necesitando.
Rubén, de 18 años, otro de los jóvenes miembros del grupo de panadería, comenta que quieren variar los productos: “Hemos solicitado que nos capaciten en repostería, para mejorar el producto y tener algo más novedoso” destaca.
En la comunidad de Playa Grande, Visión Mundial apoya iniciativas con jóvenes emprendedores, además del grupo de panadería, hay uno de hamacas y otro de manualidades.