Documento de Abogacía: Abordando el COVID-19 en las ciudades frágiles del Triángulo Norte de Centro América

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Abordando el COVID-19 en las ciudades frágiles del Triángulo Norte de Centro América
Wednesday, December 9, 2020

El Triángulo Norte de América Central, formado por Guatemala, El Salvador y Honduras, es una de las regiones más pobres del hemisferio occidental. Los residentes padecen altos niveles de pobreza y desigualdad; brechas en servicios básicos críticos, inestabilidad política y gobernabilidad débil; el impacto del cambio climático en su seguridad alimentaria y sus medios de vida; la amenaza de desastres naturales, como el huracán Eta; y el crimen organizado y la violencia generalizados, con algunas de las tasas de homicidio más altas del mundo.

Antes de la pandemia de COVID-19, esta fragilidad multidimensional afectaba a cientos de miles de hombres, mujeres, niñas y niños. La violencia, así como la falta de oportunidades de generación de ingresos, llevaron a muchos a huir de sus comunidades o migrar en busca de una vida mejor.

La pandemia de COVID-19 y algunos esfuerzos bien intencionados dirigidos por el gobierno para prepararse, responder y contener el virus en todo el Triángulo Norte han abrumado a las ya débiles instituciones de servicios sociales y exacerbado las difíciles circunstancias que padecen muchos niños y familias, poniendo en peligro su situación inmediata y salud, bienestar y seguridad a largo plazo. Tras meses de crisis, los gobiernos han comenzado a suavizar las restricciones, pero la amenaza del virus aún acecha y un número aún mayor de personas se ha visto empujado a la pobreza y la vulnerabilidad después de meses de confinamiento.

Este resumen de políticas analiza el contexto en evolución en las ciudades del Triángulo Norte de América Central y cómo World Vision está respondiendo a la fragilidad urbana y al COVID-19 en estas ciudades y, en base a esta experiencia, brinda recomendaciones sobre lo que los tres gobiernos, la ONU , Las ONG y el sector privado pueden hacer para fortalecer los esfuerzos de respuesta y, al mismo tiempo, establecer planes de recuperación que creen ciudades más seguras e inclusivas para los niños y comunidades más fuertes, cohesionadas y pacíficas para todos.